Cómo resolver los problemas con tu vecino


Blog 6: Cómo resolver los problemas con tu vecino

 

Vivir en comunidad implica compartir espacios, recursos y momentos con personas que, aunque no lleguemos a ser mejores amigos, forman parte de nuestro entorno cotidiano. Si bien no hay que ser mejores amigos entre todos, una buena relación con vecinos brinda tranquilidad. Por otro lado, tener conflictos con el vecino puede llegar a ser una situación desagradable al llegar a tu hogar y enfrentar problemas. A continuación, describiré algunos tips para mejorar la relación con los vecinos y resolver problemas.

 

1. Encontrar la hora y el momento adecuado para conversar:

 

El primer paso para resolver un problema con un vecino es encontrar la hora y el momento adecuado para conversar y tratar de resolver el problema. Si lo hacemos en un corto tiempo, solo vamos a lograr aumentar la frustración en ambas partes y no avanzar.

 

2. Tener diferentes puntos de vista:

 

Asimismo, creo que tener diferentes puntos de vista puede ser beneficioso para que ambas partes reconozcan sus errores y traten de arreglarlos. Las partes deben ser asertivas para lograr una buena comunicación. Así, en lugar de imponer nuestra solución, podemos proponer varias opciones y trabajar en conjunto para encontrar la que mejor se adapte a las necesidades de ambos.

 

 

3. Llevar una buena relación con los vecinos:

 

Igualmente, tratar de llevar una buena relación con los vecinos y llegar a conocerlos un poco facilitará la comunicación entre ambas partes. Una buena manera de lograr esto es buscar intereses en común de ambas partes. Por ejemplo, mi familia suele conversar bastante con mi vecina sobre las mascotas que tenemos y se dan tips de cuidado entre ambas partes.

 

4. Ser más empáticos y asertivos:

 

Expresar nuestras necesidades, sentimientos y opiniones de manera clara, directa y respetuosa es esencial para una comunicación asertiva. Evitar culpar o atacar al otro, y enfocarse en describir el problema y cómo nos afecta, permitirá abordar la situación de forma constructiva. Un buen ejemplo de comunicación asertiva es decir “Me molesta cuando pones música muy fuerte en la noche, porque me impide dormir. ¿Podríamos llegar a un acuerdo para que bajes el volumen?”

 

En resumen, construir una buena relación con nuestros vecinos requiere esfuerzo, paciencia y compromiso. Sin embargo, los beneficios de una convivencia armoniosa son invaluables: un ambiente tranquilo, un sentimiento de seguridad y pertenencia, e incluso la posibilidad de encontrar nuevos amigos y apoyo en nuestra comunidad. 

 

 

 



 

“Bruno, de 11 años” La mascota de mi vecina a la cual queremos mucho.

 

 

Referencias

 

Howley, P., Neill, S., & Atkinson, R. (2015). Who Needs Good Neighbors?. Environment and Planning A, 47, 939 - 956. https://doi.org/10.1068/a140214p.

Comentarios

Entradas populares de este blog

¿Crisis? NO!, es una oportunidad

Yo y mis tabús… una mirada interna hacia mis prejuicios

El mundo al revés